Si ves que tu hijo se rasca el pelo más de lo habitual, o te dice que le pica, debes ponerte en alerta. Es probable que tenga piojos. Lo primero que debes hacer es inspeccionarle a fondo la cabeza para comprobar si tiene piojos o liendres. Si estos desagradables parasitos han empezado a anidar en su cabeza debes iniciar inmediatamente un tratamiento de choque. Si no, lo mejor es seguir unos recomendaciones básicas para prevenirlos.

Según estudios recientes, durante el curso escolar los piojos suelen afectar a entre un 10 y un 20% de los alumnos. Si descubres que tu hijo es uno de ellos,debes poner solución, pero no es necesario montar en cólera. El tener piojos no tiene nada que ver con la higiene, ni es una enfermedad grave. Con el tratamiento adecuado y el sentido común se puede acabar con estos molestos parásitos.

Niña con piojos

Recomencaciones básicas para evitar los piojos

Puede parecer un obviedad, pero los piojos se pegan, o mejor dicho, pasan de una cabeza a la otra, cuando éstas estan en contacto, algo muy habitual entre los niños y adolescentes sobre todo cuando miran un videojuego, el móvil o la consola. Además, cuanto más largo es el pelo más probabilidades de infestaciones, es por eso, que suelen ser las niñas las que más padecen los piojos.

Para evitar el contagio, es fundamental la prevención. Una detección precoz, es lo único que nos puede ayudar a evitar que los pijos se propagen a sus anchas por la cabeza. Por ello, es aconsejable hacer una inspección minuciosa del cabello todas las semanas, sobre todo si nos han avisado que hay un brote en el colegio o en el campamento.

Debes tener en cuenta que es mucho más fácil eliminar las liendres que los piojos. Una hembra puede depositar seis  liendres cada noche durante 10 días. Si a ello, le añadimos que en los primeros días no suele producirse una reacción alergica a la saliva que inyectan los piojos y que produce los picores, tenemos que pueden haber pasado tres semanas desde la infestación, cuando veamos que nuestro hijo se rasca con frecuencia. Un tiempo demasiado largo, puesto que los primero piojos habran empezado ya también a reproducirse.

Cómo buscamos los piojos

Lo mejor es hacerlo cerca de una ventana, aprovechando la luz solar y después de haberle lavado la cabeza al niño. Los piojos se mueven peor con el pelo mojado, lo que nos ayudará a verlos más fácilmente. Pondremos una toalla blanca sobre los hombros, para detectar con rapidez si cae alguno y con una lendrera inspeccionaremos el cabello. La iremos pasando mechón a mechón desde la base del cabello hasta la punta, inspeccionandola en cada pasada para ver cualquier piojo. Si la lendrera es de un color claro será más fácil poder ver si hay piojos.

Tratamientos contra los piojos

Una vez tengamos la certeza de que nuestro hijo tiene piojos es el momento de aplicarle el tratamiento adecuado. Para ello, lo mejor es buscar la recomendación de tu farmacéutico, pues actualmente existen infinidad de productos en el mercado.

Existen numerosos tratamientos para acabar con los piojos de forma rápida y contundente, entre ellos Full marks o Paranix. Hay otras marcas, como Goibi, que nos ofrecen también diferentes tipos de productos dependiendo del tipo de cabello, así como de severa sea la infestación.

aceite arbol de te

También existen tratamientos naturales, que más que a combatir nos ayudan a prevenir. Es el caso del vinagre de manzana y de determinados aceites, como el del arbol de té. Un uso continuado de los mismos nos puede ayudar a terminar con ellos en la fase inicial.

Tras el tratamiento, es recomendable continuar utilizando la liendrera durante los días posteriores para detectar y eliminar si se ha quedado alguno.

Deberemos limpiar a fondo todo lo que haya estado en contacto con la cabeza infestada: almoada, peine, gorros, etc. y hacer revisiones periódicas para evitar una nueva infestión