Las primeras semanas de la vida de un bebé suelen ser bastante duras para los padres, sobre todo si estos son primerizos. ¿Por qué llora mi bebé? Hay que descubrir qué es lo que quiere decirnos nuestro pequeñín en cada momento: tengo hambre, sueño, me duele…Una angustia que se multiplica, cuando el bebé sufre los llamados cólicos lactantes. Él llora desconsoladamente, y los padres no saben qué hacer para que deje de hacerlo.
¿Cómo se si mi hijo sufre un cólico lactante?
Normalmente suelen aparecer por la tarde, el niño siente un malestar general, que le hace llorar desconsoladamente, y se encoje flexionando las piernas hacia la tripa. Los cólicos suelen tener una duración aproximadamente de 2 horas y se calcula que los sufren más de un 20% de los bebés. En la segunda semana de vida del recién nacido suelen aparecer, y se van en torno al tercer mes, aunque sobre la sexta semana es cuando son más intensos.
Se desconocen las causas exactas que los motivan, pero se cree que son varias. Por una parte, una incorrecta posición cuando comen, que les hace tragar más aire del necesario. También se puede dar el caso de que el niño sea intolerante a las proteínas de la leche, y sea esto, lo que motive el cólico lactante. Pero, también se cree que los cólicos podrían estar causados por un aumento en la producción de algunas hormonas del intestino (motilina, gastrina, etc.). A todo ello hay que añadir la cantidad de horas que los niños pasan en posición horizontal, y que dificulta la expulsión de los gases.
Hay una serie de indicios que nos ayudaran a saber si nuestro hijo está sufriendo un cólico lactante:
- Los cólicos lactantes suelen aparecer siempre a la misma hora, por la tarde, y de forma repentina.
- Nuestro hijo llora desconsoladamente, y nada de lo que le hagamos le calma, a diferencia de lo que ocurre en otros momentos del día. Está molesto, inquieto e irritable.
- El bebé se encoje, su vientre está endurecido, flexiona las piernas hacia la tripa y cierra los puños.
- No puede dormirse, y si lo consigue, se despierta inquieto y llorando.
- No puede expulsar los gases, ni evacuar las heces con facilidad, y no sufre ni diarrea ni ningún otro síntoma de una enfermedad gastrointestinal.
Si ves que es esto lo que le pasa a tu hijo, no te preocupes, no es que no sepas tranquilizar a tu hijo, es que sufre los molestos cólicos lactantes.
¿Qué hago cuando el bebé tenga un cólico?
Es importante intentar evitarlos, aunque no siempre se consigue. Para ello, si le das el pecho comprueba que tu bebé introduce toda la aureola en su boquita y que la nariz la tiene despejada para poder respirar. Cuando finalice, debes hacer que eructe, pues así expulsará el aire que ha tragado, y se sentirá mejor. Ahora bien, ten en cuenta que no siempre tragan aire, y no hay que empeñarse en exceso.
Si por contra toma biberón hay que cuidar que se le dé bien. Actualmente, existen diferentes biberones en el mercado concebidos para intentar que los recién nacidos no traguen tanto aire.
Lo que no debes hacer nunca si crees que tu hijo tiene un cólico es intentar que vuelva a comer, porque lo único que conseguirás es que le cueste todavía más hacer la digestión, y con ello aumente su malestar. Mantén la calma, intenta mostrarte tranquila para intentar relajar al bebé, si nos ponemos nerviosos lo único que conseguimos es ponerle más nervioso todavía.
No intentes cambiarle el horario de la comida para intentar evitar los cólicos, sin la supervisión del pediatra, puesto que no es un tema de horario.
Una buena solución es intentar calmarle, con la ayuda del chupete, y ayudarle a que expulse los gases. En una habitación tranquila, con luz tenue, intenta hacerle un masaje en la tripa con movimientos suaves en el sentido de las agujas de un reloj, verás como poco a poco se va tranquilizando.
Lo más importante es que tengáis claro que el cólico lactante no es ninguna enfermedad, que no está motivado porque estéis haciendo ninguna cosa mal, que lo sufren muchos recién nacidos, y que como llega se va alrededor de los 3 meses.
Fuentes: Ser padres, Dodot, El Mundo, Webconsultas